martes, 23 de abril de 2013

LA NUEVA ETAPA




LA  NUEVA   ETAPA   DE   LA   VIDA

Hablando con una amiga sobre las nueva etapa que comenzamos a vivir ahora que la jubilación por edad ha llegado a nuestras vidas y a las de nuestros maridos comprendí que no a todos nos afecta por igual; y recordé que hace años leyendo sobre esto aprendí y ahora comprendo que en la vida cristiana no existe jubilación; porque el cristiano siempre tiene mucho que hacer, pues uno es
                                                   Tan joven como su fe
                                                    Tan viejo como su duda
                                                     Tan joven como su confianza en si mismo
                                                      Tan firme como su esperanza
                                                       Tan viejo como su abatimiento.
Claro que también aprendí que la tercera edad debe vivirse con los pies en la tierra, el corazón en la mano y los ojos en el cielo. Por eso el salmo 90:2 dice.
                                                                        Enséñanos de tal modo a contar nuestros días que traigamos al corazón sabiduría. Y esto nos da permiso para recordar que las mejores conquistas de la vida de una persona pueden conseguirse en la vejez. Y esto no es una simple ilusión. Sino que tenemos muchos ejemplos
tanto en personajes de la Biblia como en personajes famosos de nuestra época  o anteriores que han sido ejemplos.
              Moisés  tenía 80 años cuando libró a los israelitas del poder de los egipcios y los llevó a través del desierto a la tierra prometida.
               Caléb 85 años Josué 14:10,11.
               Benjamín Franklin ,columnista a los 16 años y forjador de la constitución a los 81.
               Mozart a los 7 años 1ª composición musical.
               Golda Meyer  71 años ministra de Israel
Y muchos otros ejemplos en ambos campos.
Y también aprendí que la madurez es capaz de hacer un trabajo tanto si es supervisado como si no ; terminar un trabajo una vez comenzado; llevar dinero y no gastarlo y por último pero no menos importante ser capaz de soportar una injusticia sin desear venganza.  

2 comentarios:

  1. La edad, desde mi punto de vista, es como la matrícula de los ches que solo miran para valorar. A las personas, el carnet de identidad. Un escrito muy bonito. Besos.

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  2. Muy buena entrada!....y tan cierta...
    un abrazo

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